Patrimonio


Sevilla posee un ingente patrimonio de bienes culturales gracias a la importancia que ha jugado en las distintas etapas de la historia y que nos identifican como valores culturales propios de nuestra comunidad. Este patrimonio que engalana ciudad y que la enriquece, es admiración de los que nos visitan y debe ser motivo de orgullo y disfrute para los sevillanos.

Ese patrimonio no solo material, también inmaterial hacen de Sevilla una ciudad universal por su riqueza histórico cultural. Al ingente legado monumental la ciudad incorpora una larga nómina de hombres y mujeres que han dejado huella en la historia por su contribución a las ciencias, las artes y las letras, y a los valores militares, civiles y religiosos.

Pero este valioso patrimonio presenta a nuestra sociedad dos grandes retos: el de su conservación y el de su aprovechamiento. El de la conservación, al margen de los recursos técnico y científicos, requiere una importante dotación financiera, que hasta no hace mucho tiempo, y según los criterios de la ilustración, correspondía casi en exclusiva al Estado. Hoy ese concepto está superado y se extiende a otros ámbitos sociales con la aparición de mecenazgos y otras fuentes de ingresos derivadas del propio uso de los bienes culturales.

El otro campo de la conservación, está centrado en la concienciación social sobre el valor patrimonial. Esto pasa necesariamente por los procesos educativos y su necesaria puesta en valor entre las nuevas generaciones para que no sólo lo conozcan, sino que puedan ir adquiriendo los hábitos de respeto y preservación necesario para su mantenimiento. Esta tarea es vital y tan necesaria como la de la disposiciones financieras.

El aspecto del aprovechamiento del patrimonio nos plantea la necesaria búsqueda de estrategias encaminadas a fomentar el desarrollo del turismo cultural, no solamente como motor económico, sino también como preservador de los valores y del patrimonio cultural de las naciones, desde una perspectiva que garantice el respeto y la conservación de los mismos a través de un mayor conocimiento entre los turistas, y de intercambios interculturales fructíferos que contribuyan al desarrollo económico, social y cultural de los pueblos.

Nosotros queremos trabajar por esos objetivos  desde nuestra humilde plataforma dando cabida en nuestra revista a dar a conocer todas las joyas de este legado histórico con el fin de cumplir con la máxima de: Lo que se conoce se ama, y lo que se ama se protege, se preserva. Esa es la clave, pues no conviene olvidar que el verdadero valor del patrimonio es que sea reconocido como valioso por los miembros de la sociedad en la que está inserto.